De la trastienda: Series que ni de coña marinera

Publicado: febrero 20, 2014 de josemasaga en De la trastienda, Serie
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Admito que tengo un problema de bulimia televisiva (y al decir televisiva no puedo evitar sonreírme, ya que ni recuerdo la última vez que vi una serie… en televisión), que engullo serie tras serie, muchas veces sin descanso entre una y otra, a menudo si darle un mínimo de tiempo a una que acaba de comenzar, y siempre pensando en lo que vendrá después. Me lo haré mirar. Como consecuencia de este desorden alimentario catódico, he empezado a ver seriales a cascoporro, muchos de ellos bodrios de alto octanaje; como con un libro, no me duelen prendas en mandar una serie a la papelera de reciclaje virtual. La vida es muy corta, y los torrents echan humo.

Desde que comenzó el año o así, me he encontrado con tres series que no han pasado el estricto control de calidad y los altos estándares que me he fijado: es decir, no aburrirme mientras las veo. Que den vergüencita ajena también es un factor decisivo, por cierto. Las agraciadas en este cuarto de año son…

Casi me engañáis, pero al final no

Casi me engañáis, pero al final no

Almost human. Casi buena, podría haber sido. De lo poco que sale de ci-fi en el mundo televisivo (sí, hay muy poco de este género, supongo que sobre todo por lo caro que debe salir comprar a un esclavo surcoreano para que haga los efectos especiales por ordenador), y resulta ser muy blandito. El supuesto no tenía mala pinta: en un futuro cercano con androides, implantes cibernéticos, pero sin coches voladores, un policía que casi la palma vuelve al cuerpo y se encuentra con que tiene que hacer la ronda con un pedazo de plástico con chips con forma de policía macizo (Michael Ealy de Sleeper cell, una serie que sí merece la pena ver). Lugares comunes, situaciones que prometen pero tratadas superficialmente, efectos especiales de baratillo, buenas intenciones pero malas ejecuciones, moralina… todo lo peor del mundo televisivo estadounidenese, resumido en esta serie. Lo que más jode es que intenten ponerse intensos al estilo Blade runner, con temas como aunque sea sintético, ¿puedo tener sentimientos? Con esto no se juega, fascistoides de la Fox. A Blade runner no me la toquéis que ma-to.

No hagáis caso al cartel, la serie no es así

No hagáis caso al cartel, la serie no es así

Grimm. Grima me da. Un policía (qué fijación con los cuerpos del orden) descubre de pura chiripa que es el heredero de una saga familiar que se dedica a exterminar a los monstruos que viven entre nosotros (si no fuera porque son literalmente monstruicos, diría que habrían tenido trabajo pa’ rato). De nuevo, lo que de entrada es una buena idea (dar un giro a los cuentos clásicos ambientándolos en la actualidad, como Once upon a time pero con un poco más de redaños), degenera en una concatenación de escenas previsibles, acción de pacotilla, secundarios miérder, y efectos digitales de baratillo que sonrojarían al cine de Bollywood. Ya en los primeros episodios, se agota el tema al centrarlo en mostrarnos una sucesión de personas-bestezuela, desde el lógico hombre lobuno hasta el marciano y muy poco de cuento popular mujer abeja (¿?). Supongo que lo que buscaban aquí era un family show, al estilo de las series infumables españolas como Águila roja, pero esto puede aburrir a pequeños y mayores por igual. Tanto dinero tan mal aprovechado…

Yo si fuera vosotros cogería el paraguas...

Yo si fuera vosotros cogería el paraguas…

Supernatural. Sobrenatural es el morro de los guionistas. Nos ponen la miel en los labios con un episodio piloto macarra, violento, y diría que hasta ocurrente y luego desgranan una sucesión de episodios muy petardos y sosunos. Lo de que tu hermano largamente olvidado regrese para que le acompañes en sus alegres cacerías de seres sobrenaturales malotes es una reinterpretación del género de delincuentes juveniles; de hecho, las hechuras de los hermanitos son calcadas del cine quinqui con más solera… combatir el mal no da dinero, amiguitos, hay que buscarlo de otras formas. Total, que en un flasback bastante heavy metal presenciamos cómo la madre de ambos muere achicharrada en el techo de su dormitorio (¿?) por obra y gracia de un demonio o un ser maligno al uso. El padre, y aquí todos podemos entenderlo, se pone en plan Sarah Connor y prepara a sus hijos para combatir al mal y al capital; el pequeño se harta de una vida repleta de emoción, exorcismos, y atracos a drug stores y decide estudiar derecho (¡¿?!). Hasta aquí todo bien; lo malo es lo que sigue. Al más puro estilo serial, los capítulos son una especie de un remake de Scooby Doo con su monstruo de la semana y repitiendo manidos esquemas uno tras otro, en vez de crear un hilo argumental sólido e interesante. Qué oportunidad más desaprovechada.

Algo me dice que habrá más entradas como esta en el futuro; si esta burbuja televisiva no estalla en algún momento, seguirán surgiendo infraproductos como estos. Permanezcan atentos a sus pantallas… bueno, o mejor no.

comentarios
  1. LaSoPhi dice:

    Debido a tu «bulimia televisiva» nos ahorramos el tragarnos un montón de series basura. Gracias!!

  2. Guiller dice:

    Con sobrenatural, en parte tienes razón, pero eso no significa que sea mala serie y que no sea recomendable.

    No voy a discutir que las hay mejores, porque las hay. Pero esta se deja ver. Creo que hay muchas, que son más insufribles que estas que citas.

    • josemasaga dice:

      Sí, es cierto que hay algunas mucho peores que Sobrenatural. Lo que me decepcionó es que partiendo de un supuesto muy interesante eligieran derroteros trillados…

      ¡Un saludo!

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